Hace tiempo decidí arriesgar por aquello que consideraba que aunque no fuera lo correcto, era lo que me hacía feliz. Sin buscar culpables, el tiempo se puso en contra y las cosas no salieron como yo pensaba. Consecuentemente mis sentimientos dejaron la claridad y se refugiaron en un tenue lugar de mi pecho.
Ahora tenía la posibilidad de volver atrás una vez más e intentar esclarificar lo que sentía, de remontar el vuelo compartido, de enmendar los errores del pasado. Pero esta vez era diferente, faltaban las ganas.
3 comentarios:
Preciosa entrada aunque sea muy triste y te doy toda la razón las ganas faltan, pero nunca hay que perderlas todas.
Un besito.
¡Gracias por los ánimos! ^^
Un besito enorme ♥
PD: Me ha encantado esta entrada ;*
♥
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